viernes, 17 de marzo de 2017

PRÁCTICAS PARA LA IGUALDAD




Las mujeres son un porcentaje minoritario en muchos de los ámbitos profesionales, políticos y sociales, hoy en día.


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Es una realidad, por eso, si queremos estar representadas, es necesario que luchemos por nuestros propios intereses, acompañadas de quien quiera, porque solo de esta manera, se podrá conseguir este objetivo.

Si no hay acción, todo quedará igual. Y somos la mayoría de la población!



Partamos de la base principal: la EDUCACIÓN.

La educación que hemos tenido ha marcado y dividido por sexos, estereotipando cada uno de nuestros roles, actitudes o acciones.




El rol femenino, en muchas ocasiones es relegado a un plano de inferioridad, en relación al plano en el cual se encuentra el masculino.

Tenemos que ser guapas, suaves, dulces, femeninas...y tantas cosas que nos impiden ser, en muchas ocasiones como quisiéramos, intrépidas, aventureras o fuertes.

Esta condición femenina hace que culturalmente, nuestro lugar haya sido, el de la ayuda, el servicio o la limpieza.

Pero la condición de ser mujer, nos conduce siempre, inevitablemente, al cuidado de los hijos, familiares enfermos o mayores, a trabajos de limpieza poco cualificados o a perseguir como único objetivo la belleza.

No estamos "programadas" para este tipo de labores, sino que, simplemente la hemos desarrollado mucho más que los hombres a lo largo de la historia.

Por eso, la educación, es el principal pilar, para cambiar desde la base. 

  • Educar, desde casa y desde las escuelas, sin sesgo por sexos
  • Ayudar en el proceso de elección de objetivos, ya sean deportivos, educacionales o profesionales
  • Tomar conciencia de la educación diferenciada y poder actuar en consecuencia
  • Utilizar el lenguaje inclusivo para representar a ambos sexos
  • Responsabilizar a los niños y niñas de sus tareas, prestando atención a la edad, la capacidad y no a su género
  • Alertar de estereotipos sexistas: hablar de ello, ponerlos en duda, incluso ridiculizándolos
  • Evitar las relaciones de superioridad de un género con respecto al otro
  • Ofrecer las mismas oportunidades a chicos y chicas
  • Respetar la diversidad, que es la riqueza humana
  • Aprender a través de valores de igualdadad, tolerancia y respeto









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